lunes, 23 de octubre de 2017

GANAR Y GANAR Y GANAR Y VOLVER A GANAR. ESO ES EL FÚTBOL - (Luis Aragonés, "el Sabio de Hortaleza")


Una reflexión sobre cosas importantes del Neuromarketing: CONTEXTUALIZAR

Con esta conocida frase, inmortalizó el brillante entrenador español su definición del fútbol: Ganar y ganar y ganar y volver a ganar… Eso es el fútbol.

¿Qué tiene que ver esa visión del fútbol con el Neuromarketing?

Pues en nuestra opinión hay un elemento clave en común:

Investigar comportamientos del consumidor mediante neuromarketing consiste en “contextualizar y contextualizar y contextualizar y volver a contextualizar. Eso es el Neuromarketing como proceso de investigación”.

Si bien es cierto que las técnicas y dispositivos tecnológicos utilizados en neuromarketing han superado con creces la calidad y precisión de los datos que se obtenían mediante procedimientos tradicionales, no es menos cierto que investigar y aplicar neuromarketing exige realizar cada investigación en los contextos adecuados, reales y por tanto, “habitados” por los consumidores a la hora de buscar, valorar y decidir dónde y cómo gastar sus recursos.

¿Qué entendemos por “contextualizar” en neuromarketing?

Llevar las unidades móviles y los dispositivos de investigación al lugar donde se produce el proceso de decisión de compra del bien o del servicio.

 Uno de los retos del buen marketing es segmentar correctamente, identificar al público objetivo con precisión y conocer qué piensan y qué sienten mientras crean su experiencia de compra. ¿Dónde vamos a encontrar con más precisión al cliente-objetivo que en el lugar donde él o ella ha decidido ir a comprar?

Sea en interiores o exteriores, sea en el establecimiento comercial, ya sea en la peluquería donde se presta el servicio o en el banco donde acude el cliente a hacer sus gestiones, contextualizar es estar donde él y ella están.

Es precisamente allí donde se crea la experiencia de compra, donde todos los sentidos del consumidor toman contacto con la marca. Por tanto, es el sitio de contextualizar y volver a contextualizar.

 ¿Y cuando las investigaciones a realizar es sobre el impacto y efectividad de soportes gráficos, spots TV, sitios web, etc.? ¿Cómo contextualizarlas?

Desde nuestro Laboratorio, seguimos apostando por salir de la cueva, del “espacio controlado” y llevar las unidades móviles de investigación al lugar donde el cliente toma contacto con la marca. Identificar qué punto de la cadena de contacto consumidor-marca es el adecuado para instalar el punto de investigación y desplegar toda la batería de dispositivos: Eye Tracking Fijo y Móvil, el Análisis de Expresión Facial, los neurosensores-EEG y el análisis de resistencia galvánica de la piel, conocido como GSR. Y allí, con toda “la orquesta” que el neuromarketing nos permite utilizar actualmente, se recogerán datos precisos de seguimiento ocular, huella emocional y nivel de recuerdo con la mayor efectividad.



Porque si para consultar sobre nuestra salud nos dirigimos al médico, si para consultar sobre un diseño y construcción nos dirigimos al arquitecto y para reparar nuestro vehículo vamos al taller de referencia, ¿a quién y a dónde vamos a acudir para conocer el comportamiento y sentir del cliente en su experiencia de compra o en su valoración y posicionamiento de la marca? Cierto… acudamos al cliente.

De ahí que desde estas líneas nos reiteremos parafraseando a Luis Aragonés en el “contextualizar y contextualizar y contextualizar y volver a contextualizar. Eso es el Neuromarketing como proceso de investigación”.


Gabriel Carrascosa Mendoza
Director del Laboratorio de aplicaciones de Neuromarketing Fusión Comunicación & Estrategia